Valencia será menos ‘dulce’ – “La Columna”

25 mayo 2016 por Francisco Ponce en La columna, Noticias, Todos los artículos, Valencia - España

La Columna de opinión periodística

La casa de los caramelos

El carismático establecimiento de <<La casa de los caramelos>> en Valencia cerrará sus puertas en breve

Muchos mayores emprendemos paseos para recorrer la valencia tradicional en donde entra este emblemático establecimiento, con más de medio siglo de existencia, y que además los pequeños admiran y gozan – arrastrándote de la mano – para que les compres alguna pequeña ‘chuchería’… se acabó, los iluminados no les renuevan el contrato.

Fachada Casa de los Caramelos en Valencia

El 25 de julio. Será el día en que la Casa de los Dulces bajará las persianas tras 63 años de actividad. Es la situación a la que se ha visto abocada su actual propietaria, Emilia García, tras la negativa de Les Corts -propietaria del edificio- a prorrogar el contrato de alquiler.

<< No me han dado ninguna justificación>>, manifiesta García, que lleva meses intentando negociar su continuidad, sin obtener respuesta para mantener un negocio que no se ha visto afectado por la crisis ni por la renta antigua, pues el precio del alquiler se actualizó al del mercado cuando Emilia y su hermano Vicente heredaron el negocio de sus padres.

Fue hace dos semanas cuando recibió la notificación de la finalización del contrato y, por tanto, del cierre del negocio, que afectará a los dos locales de la calle Muro de Santa Ana, es decir, la tienda de caramelos y el salón de té contiguo, adquirido en 1999 y también propiedad de Les Corts.

Casa de los caramelos en Valencia

Tanto para los siete empleados como para Emilia la hija de Vicente García, fundador de un negocio que arrancó como frutería y que luego se amplió a la venta de caramelos, tras el éxito que tuvo en sus tiempos el ‘Pictolín’, se les abre un futuro incierto

Aunque Les Corts no se han pronunciado todavía sobre el destino del inmueble que adquirió por 6,8 millones al Arzobispado de Valencia en 2005 mediante subasta. De ahí que Emilia García no comprenda la negativa de la institución a renovar el contrato de alquiler.

En apenas dos meses bajará la persiana del negocio que impulsaron sus padres y que se convirtió en peregrinaje de aquellos que buscaban sus garrotes o piruletas gigantes o los caramelos de violetas. Por eso, García quiere agradecer a sus clientes <<el cariño y apoyo recibidos a lo largo de más de 60 años>>.