Café de las Horas – Poesía internacional – Valencia

22 junio 2010 por Francisco Ponce en Eventos culturales, Todos los artículos

Siguen los lunes de soles poéticos, cada vez somos más y eso motiva, los participantes traen sus obras, las recitan y comparten.

(Parte del salón)

(Parte del salón)

En un entorno tan carismático como la proximidad de la Plaza de Virgen en Valencia, se encuentra “El café de las horas” que en su barroca y glamorosa decoración, alberga ya muchas y creativas reuniones literarias-poéticas y una ‘Gala’, que ha sido comentada de forma muy positiva dentro de los medios culturales de la capital.

Mauricio Vilades, nos trajo sus libros de los que recito algunos de sus poemas complementados con nuevas e inéditas obras en preparación. Tiene ese acento colombiano, su país de origen,  que engarza como orfebre de la palabra en todo su poesía vitalista.

Hermelinda Rasal o “Tierra Dulce”, como ella se da a conocer en el mundo artístico, donde alcanza notoriedad como actriz, cantante y poeta, hace silencio en la sala cuando recita, pues curiosamente el murmullo de la clientela del salón decrece paulatinamente en proporción inversa a la elevación de su voz declamando. Luego el aplauso trasciende más allá de los tertulianos.

Mascha Alex guapa mujer nacida en Alemania y afincada en Valencia, cada día aporta más y mejor poesía en castellano, con algún modismo de esa hermosa tierra que es Chile y en donde entre otros lugares pasó unos años. Mascha ya es una incondicional de las tertulias, y en esta última reunión vino acompañada de una amiga poeta mexicana, que nos regaló algunas de sus odas, además de hacer fotos para su álbum de recuerdos.

Paco “La voz” del grupo, trae poesía de alto voltaje y a pesar de que no se prodiga mucho pues su residencia está a varios kilómetros de la capital, cuando lo hace, llena espacios y pone calidez en el entorno.

Nuestra poeta uruguaya, Patricia Cuenca, desliza acento de nostalgia con intención social que hace pensar, su encanto como mujer y valía como poetisa forja una delicada composición que anima a escucharla.

El tono almibarado de José Manuel Da Rocha Cavadas, un portuguéscon voz de fado – al que se le resiste el castellano, pone más notas de internacionalidad y si bien sus poemas son escasos lo suple recitando, con gran entusiasmo, trabajos prestados por los tertulianos que declama con ternura.

Se ha conseguido un gran grupo con un denominador común, la poesía, la amistad y el deseo de compartir.