Francisco Ponce Carrasco

Castellnovo C.F. – Una victoria que da moral

Sábado 19 de febrero y a las seis de la tarde, no era lo acostumbrado. Y el problema residía en  quien les llevaría a Sagunto donde se celebraba el encuentro.

El hijo de Genaro tenía trabajo esa tarde y la cosa no pintaba bien en cuanto a trasporte, se habían tomado su ‘cafenito’ en el bar de los jubilados que se encuentra muy próximo al Portal, lugar desde donde los días que el Castellnovo C.F. juega fuera del pueblo, se citan algunos coches y amigos para salir a presenciar el partido.

-Asómate Genaro a ver si conoces a alguien.– le dijo «Segis».

– ¡Leche! Asómate tú que tienes más ‘cara’.

Cada vez llegaban más coches pero era gente joven con sus novias y al completo, se fueron acercando haciéndose los distraídos para ver si con suerte se colaban de rondón en algún vehículo, cuando ya se veían en tierra, apareció la furgoneta del dueño de la carpintería que les hizo una seña para que subieran.

-¿Vais a ver el partido?-

-¿Sí nos llevas…?- respondieron a coro.

Durante el trayecto, por cierto muy animado, se habló de la posibilidad de ganar algún partido más, para mantener esa posición en la tabla clasificatoria, modesta, pero alentadora para un equipo de reciente creación.

(Castellnovo-Sagunto)

Llegaron a Sagunto, preguntaron un par de veces pues estaba un poco intrincado encontrar el “Camp de la Xulla”, al fin se hicieron con él y tomaron posición en un extremo, con los aficionados de Castellnovo, que eran más que los de la localidad.

Una primera parte de dominio alterno mantenía la esperanza de los ‘rojillos’ pues por coincidencia de colores, el Castellnovo jugaba con la segunda equipación.

-Siempre nos pasa igual.- lamentó Segismundo.

Y lo que pasó igual, fue que a punto de finalizar la primera parte el F.B. Sagunto marcó un gol en una jugada de infortunio, con su poquito de despiste defensivo.

No dominaba el buen humor entre la afición del Castellnovo, perdiendo sin merecerlo y ahí estaba el 1 – 0.

Salieron los chicos y algo pareció haberse conjurado en la caseta al descanso, pues el arrebato era manifiesto, tanto que en los primeros compases, minuto 48, llega el gol del empate a través de (Manolo) que se inventó un tiro cruzado y ajustado al poste, marcando. Luego diez minutos arrolladores del Castellnovo C.F. hicieron que consiguieran en el 52, tras un saque de córner y con un precioso cabezazo de (Lon) poner el 1 – 2, el delirio vino en el 58, de nuevo (Manolo) de un fuerte chut marca el tercero.

(Jugada)

Segismundo, Genaro y el dueño de la carpintería, hacían la rueda abrazados de contento, al tiempo que coreaban: ¡Castellnovo! ¡Castellnovo!

Los locales presionaban pero sin poder remontar, el equipo visitante se sentía fuerte con el marcador a favor, un par de embestidas obtuvieron la magnífica respuesta del portero (Jacinto) que reverdecía viejos tiempos.

Faltando un cuarto de hora para el final, en una de tantas, el F.B. Sagunto consigue perforar la portería y pone el 2 – 3 momento en que los tres amigos cesan en el abrazo conjunto, se tenía que aguantar como fuese, se mostró valentía en un ‘toma y daca’ constante hasta que al filo del minuto 90, en un contraataque bien llevado por (Adrian), chuta para que (Lon) que penetraba por banda derecha marque. El Castellnovo C.F. sentenció el definitivo 2 – 4 con que finalizó la contienda.

(Último esfuerzo)

De nuevo los tres inician el abrazo rotatorio, acompañados de canticos de victoria.

-¡Qué partido! ¡Qué partido!- repetía Segismundo.

-Si nos quedamos en el pueblo, nos da algo.-

-Amigo carpintero, cuando hagamos casa nueva, las puertas, las tuyas.-

-Qué puertas, ni qué puertas, ¡Viva el Castellnovo! gritaba al volante, el carpintero.

Fotografías de: Marta Olcina