Con la sensibilidad que la caracteriza, nuestra escritora Mexica “Marichu”, nos retrotrae a una época en que su cuento tiene matices de encantamiento con lección de sapiencia y esperanza, un acaramelado sabor que muchos hemos probado.
Quizá hoy queda en nostalgia, pero hace bueno su dicho: “Recordar es volver a vivir”, por cuanto no está de más perpetuarlo y quizá a muchos lectores nos gustaría que en la actualidad, nuestros nietos, experimentaran estas vivencias tan gratificantes que nosotros pudimos disfrutar.
El cariño y la ilusión por los nietos sigue y seguirá intacta por muchas generaciones que pasen, pero esos entornos envueltos en el aroma de lo idílico, ya quedaron algo escondidos por desventura.
En cualquier caso esta es una mera opinión mía y no en todos los lugares son las cosas de igual forma, por eso bienaventurados los territorios donde la imaginación de Marichu sea una cotidiana realidad.
Pulsando sobre la imagen superior de la margarita, podrá acceder al (pdf) que se abrirá, mostrando el relato íntegro para su lectura, por gentileza de su autora.