El Abrelatas, cabecera del escritor Francisco Ponce
en el periódico 20minutos, publica el
jueves 09-10-08, el siguiente articulo.
De siempre se ha dicho que el principal activo de una empresa son sus clientes y que “Siempre tiene razón”.
En los últimos años este criterio había languidecido con especial acento en los sectores boyantes por exceso de demanda. Los intereses bajos propiciaban un flujo de dinero que corría paralelo a las ansias de poseer.
La subida de los tipos de interés y el cierre del ‘grifo’, por parte de la banca, a la concesión de créditos incluso de baja cuantía, tiene ralentizado el mercado en general, esto unido a la inseguridad del empleo esta propiciando la actual crisis. Algunos estamentos que la venían ocultando ya empiezan a reconocer que existe. Esta situación, no deseable, ha vuelto a posicionar en su sitio a la figura del comprador. En la actualidad “Quien tiene un cliente, tiene un tesoro”.
Las épocas de recesión gozan de pocos aspectos favorables, pero sí clarifican las empresas y mercados. Hoy el cliente sonríe, vuelve a ser protagonista, si tiene dinero para ser cliente.