Francisco Ponce Carrasco

Tiempo de perros

Tiempo de perros, una forma coloquial de definir las fuertes inclemencias atmosféricas, preferentemente en época invernal.

La España peninsular, esta sufriendo estos últimos días de enero y primeros de febrero del 2009, un clima muy ‘revuelto’ y los termómetros marcan temperaturas que si bien son propias de la estación, la opinión más generalizada apunta, a que este invierno esta siendo el más gélido de los últimos diez años.

A juzgar por las imágenes ciertamente se podría catalogar así. Pueblos con gruesa capa de nieve, carretera de difícil visibilidad, e inconvenientes mil.

Algunos expertos atribuyen estas situaciones extremas al ‘Cambio climático’. Sin embargo existen personas que opinan, que este no es un invierno frío, sino que en los últimos años los inviernos han sido muy templados o poco rigurosos y ahora notamos lo que antaño se consideraba normal.

Precaución en las carreteras, quitarse de encima alguna cadena que la vida te proporciona y ponérselas a las ruedas del coche, con lo que aliviaremos nuestro espíritu, y el coche ganara en seguridad.

Un aroma a leña quemada, chimeneas que lanzan espirales de humo, son el espectáculo más cotidiano estos días, incluso en las poblaciones próximas a Valencia, zona de temperaturas más benignas por lo general.

Lo dicho, acopio de leña –troncos de buen tamaño- relajación, buenas carnes a la brasa y sobre todo paciencia, que los inviernos son inviernos para que nos quejemos del frío, mientras esperamos el tórrido verano, para hacerlo del calor.