Hoy día la advocación por la Virgen de los Desamparados encierra un gran fervor entre los católicos y traspasa las fronteras de la Comunidad Valenciana, para emerger en el mundo entero.
El segundo domingo de mayo Valencia celebra la festividad de la Virgen de los Desamparados, Patrona de la ciudad. Existe una gran devoción por esta Virgen a la que los valencianos de nacimiento o adopción, llaman cariñosamente “La Geperudeta”, en alusión a la posición ligeramente encorvada que adopta.
Al filo de las 10,30 horas uno tiene la oportunidad de vivir el ‘Traslado’, todos los años parecido y todos los años tan diferente; este evento completamente singular y de arraigada tradición, consiste en que la Virgen Peregrina, a hombros de pueblo se lleva con fervor máximo y en volandas desde la Basílica a la Catedral, por donde entra de espalda a través de la Puerta de los Hierros.
En este “Traslado” se desata el fervor a la “Mare de tots el valencians” y en volandas la imagen recorre un corto trayecto donde los concurrentes pugnan por rozar el manto de la Virgen, una vez dentro de la Catedral se deposita al pie del altar mayor y continua el fervor en ¡Vivas a la Mare de Deu! e intentos de máxima aproximación.
Es una explosión, mezcla de devoción y exaltación de valenciania, que congrega a muchos ciudadanos que en este día rinden pleitesía a la patrona de todos los valencianos.
Estamos hablando de sentimientos y los sentimientos nacen del alma, lo que hace difícil describir los emocionados momentos que al contemplar, en su pura esencia, el “Traslado” se puede percibir.
¡Vivirlo es una magnífica experiencia que se guarda para siempre en el corazón!
Fotografías José Luis Vila Castañer