La sala de atención e información al cliente de la Estación del Norte de Valencia te recibe como si de una estancia de arte se tratase a juzgar por su atractiva decoración. Destacan sus mosaicos – trencadís – y azulejos que figuran mostrando escenas de gran tamaño con temática valenciana realizados por José Benlliure.
Actualmente, los criterios que rigen su funcionamiento tienden a mantener un logrado equilibrio entre lo funcional y la conservación de los valores intrínsecos del edificio, el servicio, a día de hoy, es de calidad y eficacia para un volumen diario que supera cincuenta mil usuarios.
Mosaicos con mujeres ataviadas con el traje típico, guirnaldas de naranjas y otros productos agrícolas decoran su fachada que se prodigan con mayor profusión en su interior. Un paisaje de flores, huerta, palmeras y al fondo las barracas típicas valencianas.
En la parte superior se puede leer “Caminos de hierro del norte” nombre que exhibió en su fundación. Bajo este enunciado de nuevo aparece una escena típica llena de luz y colorido, estos paneles tienen mucha antigüedad y se conservan en buenas condiciones gracias a la tutela y feliz restauración que desde siempre han tenido.
Acuda a informarse de lo que precise que será amablemente atendido, al tiempo que disfruta de un entorno placentero. La Estación del Norte de Valencia ha sido la primera en ser catalogada monumento histórico-artístico en el año 1983.