El escritor Francisco Ponce,
en su columna ‘El Abrelatas’
del periódico 20minutos, el 02-04-09
Para asegurarnos un buen lavado de conciencia nos manifestamos, de vez en cuando, con apagones sincronizados. Después de la reprobación de turno nos vamos a casa para ‘enchufar’ los múltiples aparatos que nos proporcionan el más placentero bienestar.
Deberíamos ser más sinceros con nosotros mismos, realizar un verdadero esfuerzo todos los días para intentar, reconvertir el proceso de destrucción. Generalmente el egoísmo es tanto que solo pensamos en el hoy y despreciamos nuestro mañana y el de las generaciones venideras.
Posiblemente hemos dejado de apreciar la tierra con el mismo sentimiento que lo hacían nuestros antepasados, tal vez haya que asomarse a nuestros recovecos más profundos para sentir a la ‘Madre Tierra’, porque al fin y al cabo, tierra es lo que somos.