La idea de esta reunión se debió a una institución llamada Unión Internacional de Protección a la Infancia, que en 1952 planteó que debía haber un día especial para festejar a los niños. Pronto las Naciones Unidas se sumaron a la idea y se decretó por unanimidad que el Día del Niño oficialmente, fuese el 20 de noviembre de cada año.
Con este conciso repaso a la efeméride, diré que lamentablemente existen muchos países donde la desnutrición y las guerras se comportan con autentica perversidad con los niños y que erradicar esta siniestra lacra debe ser una constante de quienes pueden/podemos, de alguna manera contribuir.
Recientemente tuve el privilegio de ser invitado por la Escuela Infantil “La Lluna” de La Eliana (Valencia), para realizar una sesión de cuenta cuentos y la verdad es que disfruté y hasta conseguí que los niños y niñas prestaran atención, sin moverse demasiado, cerca de 30 minutos, todo un récord.
Cabría decir aquello de “me divertí como un niño”, y espero que ellos también. En todo momento estuve arropado por la directora del Centro “La Lluna”, Sonia y las profesoras, factor decisivo, junto a los animalitos de papel que habían confeccionado y entregado a los pequeños.
Este es un centro que me impresionó por su amplitud de espacios e instalaciones de todo tipo, perfectamente cuidadas, pero sobre todo por el entusiasmo que se pone empezando por la cocinera en la elaboración de los menús para los niños (asesorada por una dietista), como por el personal docente del centro.
¡Hasta pronto chavalines! Puesto que si queréis volveré.
(Atendiendo la ley de protección a la imagen infantil, se han omitido fotografías de los cerca de 40 niños)