Una fiesta de disfraces es por lo general motivo de regocijo y éxito de participación asegurado, así aconteció el miércoles día 19 de agosto del 2009 en Castellnovo próspera localidad del Alto Palancia.
Este pueblo se encuentra enclavado en las estribaciones de la Sierra Espadan y celebró, dentro de su extenso programa lúdico-festivo, una multitudinaria noche de ‘disfraces’ con estallido de color y sabor a fiestas patronales.
Desde la prehistoria el ser humano, por diferentes razones, ha tendido a buscar disfraces o camuflajes en muchas de sus actividades por ejemplo: la ‘caza’, práctica que con frecuencia realizaba cubierto en pieles de animales, ramas y otros, para conseguir acercarse a su presa sin levantar sospecha.
Es en la Antigua Roma cuando por primera vez se usan con fines festivos, para sus festejos llamados saturnales (en honor al dios Saturno).
¿Quién no se ha disfrazado alguna vez? Los momentos de preparación que preceden al evento son intensos, comentarios de amigos, una mirada furtiva al espejo, fiesta anticipada de lo que se hará realidad, en horas venideras.
Las gentes de Castellnovo van todavía más allá y hacen de los disfraces una obra de trabajoso arte y sobre todo de imaginación, hasta el punto que ciertos atuendos son de difícil interpretación, como los que vemos en la fotografía que sigue.
Desfilar por las principales calles del pueblo en fogosa explosión de alegría, es unos de los momentos más atractivos para los participantes, que culmina con la entrada en el bonito recinto de la ‘Plaza Nueva’ donde la orquesta GAMMA les recibe al ritmo de festival.
El alboroto se adueña del entorno en punzante frenesí, la rivalidad previa, por encontrar el más atractivo disfraz se convierte en confraternidad y felicitaciones entre todos los participantes.
Queda claro, lo importante no es ser los mejores sino estar juntos en ‘Mágica noche de disfraces’.