El jueves día 20 de febrero 2014, se presentó el volumen (varios autores) de la colección “Algo que decir”, de Ediciones Ateneo Blasco Ibáñez.
Con la sala llena de público pudimos comprobar el prestigio que está colección de libros, que nace en el 2008 con la buena intención de facilitar cobertura a autores consagrados y noveles, que en un hermanamiento literario comparten la edición, a la vez que promover a los asociados del Ateneo Blasco Ibáñez de Valencia.
Abrió la presentación Elisa Moner, en nombre y representación del “Ámbito Cultural del Corte Inglés”, agradeciendo la deferencia de que se eligiera este foro para la presentación del libro.
El secretario Celestino Álvarez-Cienfuegos, corrió con la presentación de los componentes de la mesa que hizo de forma breve y amena, la presidenta Isabel Oliver, habló del libro manifestando que:
“Dentro de los aproximados 25 libros editados y en preparación, existen obras de un solo autor y también, como en esta oportunidad, de varios escritores. En el presente volumen número XXI intervienen 24 literatos en poesía, narrativa y ensayo, está prologado por el (Escritor y personalidad de las letras valencianas) Ricardo Bellveser, con la feliz particularidad de que el volumen comienza con poemas de Francisco Brines (Académico de la Lengua Española sillón “ñ”) lo que lo convierte en un placer leerlo de principio a fin”.
Seguidamente dio paso a 10 de los autores presentes que leyeron un fragmento de su obra: Mercedes Huerta, Fernando Robles, Rosa Selles, José Ferreres, Antonia Sajardo, Fernando Martín, Amparo Bonet, Amparo Gómez, José Antonio Olmedo y Manuel Rico.
Cerró el evento Ricardo Bellveser, que como es habitual en él, puso de entrada algún giro de humor, para pasar a la charla magistral y de sapiencia, aludiendo a temas de rabiosa actualidad dentro del mundo literario, siempre es grato escucharle. Por último leyó parte de los poemas de Francisco Brines – pidiendo disculpas previas por su atrevimiento – que resultó muy emocionante por el maravilloso contenido en sí mismo, como por la declamación que Ricardo le imprimió.
La tarde-noche finalizó con los saludos por el feliz encuentro y la oportunidad de reencontrar a antiguos amigos.