Francisco Ponce Carrasco

Ponga un “Bohemio” en su vida – ¡Cosa fina! Magazine

El día de mi cumpleaños acudieron todos a la fiesta, todos y uno extra…pero no era cuestión de ‘tirarlo’, ni le puedo echar en cara a mi hermano, el que viniera con Osvaldo uno de sus mejores amigos, despreocupado y remolón. (Es que es bohemio).

En realidad el hombre es un encanto además de ocurrente. (Es que es bohemio).

Todos me trajeron un regalo Osvaldo solo me estrecho la mano, ni siquiera reparó en felicitarme. (Es que es bohemio).

Cuando la fiesta hubo acabado a altas horas de la noche y todos poco a poco se fueron marchando, mi hermano y Osvaldo se quedaron para terminar con las sobras del festín y colocarse algún ‘trago’ más. (Es que es bohemio).

Casi amanecía, decidieron retirarse, antes Osvaldo saco unos lápices de colores me pidió una cuartilla y me hizo un retrato con cuatro trazos propios de un excelente artista. (Es que es bohemio).

Me lo guarde, le di las gracias y le sonreí… (Dejó de ser bohemio).