Es posible que en los tiempos que corren se precise, más que un estímulo, quizá un potente ‘empellón’ de energía positiva
Ya sabemos que ayer 22 de septiembre entramos en el otoño del calendario, luego tendremos frío en invierno, aparecerá de nuevo la primavera y un tórrido verano novato.
Lamentablemente seguirán los conflictos bélicos, éxodos, libertinaje separatista y otras injusticias. Para que no sea todo negativo algunos nos conformaremos con que España tenga pronto gobierno, sin necesidad de terceras elecciones.
Esto son claramente esquemas, pero la vida no tiene nada de esquemática y sí de sorpresiva, por esta razón debemos luchar con empeño por ser nosotros mismos, por alcanzar objetivos de altas miras, y está claro que esta carrera requiere una participación activa, ardua y perseverante de cada individuo/a para constituir la larga e inquebrantable cadena de voluntades unidas en la lucha por un mundo mejor. Un mundo que no se avergüence de los seres humanos.
Y para esto, también tiene mucho que ver la utilización de la energía positiva, tenemos que decirle, SÍ, a la vida y la vida nos hará llegar salud, bonanza y parabienes que para todos os deseo.
Si con vuestra lectura habéis llegado hasta aquí, demostráis paciencia, una buena cualidad que agradezco, para haceros llegar este metafórico “empellón” con que pretendo obsequiar a todos mis lectores incondicionales.
¡Ahí queda un pensamiento positivo!…