Estoy en medio de todo y nada tengo… tan solo una revolución, una ‘guerrilla’ que estalló hace tiempo en mi cabeza
Mirando, sin mirar, viendo sin ver, aquel punto en el infinito de la nada, mi mente vuela por los cielos del azul cielo y se llena de aves mecidas por la brisa del aire sin viento, <<y en el fondo de la noche tiembla el árbol del silencio>>.
Retrocedo a la adolescencia, cuando corría por extensos campos de trigo, mirando tras de mí, para ver la huella de mi paso, mientras las doradas espigas crecidas y altaneras acariciaban mis redondeados muslos.
No tengo ningún brujo que me acompañe ni me proteja y sin embargo me siento embrujada.
Tampoco sé muy bien lo que quiero, pero sé que algo quiero.
Aprendo de mis muchas experiencias, así nos forjamos las tontas, las necias que necesitamos que las carnes se nos abran para descubrir las enseñanzas de la vida.
¡Vida!, también deleite y alegrías, pues olvido ya siento de mis experiencias pasadas.
Estoy en medio de todo y nada tengo…
<<y en el fondo de la noche tiembla el árbol del silencio>>.