Con la sala llena de público, el sábado 11 de noviembre, un grupo de esforzados actores nos deleitaron con la puesta en escena del <<Tenorio>>, que resultó muy interesante
Gracias al Ateneo Blasco Ibáñez, podemos corroborar esta certeza, puesto que ha convertido en tradición, esta <<tradición>> y cada año por estas fechas a través de su cuadro artístico con visos de profesionales-aficionados, nos brinda la inmortal obra de Zorrilla.
Esta singular obra teatral, tiene el poder de la nostalgia, para muchos de los espectadores aquella que nos traslada a épocas pasadas –con algunos años menos – que ahora se hacen presentes y avivan el recuerdo entrando en el alma.
José Zorrilla va escalonando escenas que muestran el perfil irrespetuoso y execrable del personaje, suceden homicidios, crímenes, seducciones, jactancias de la vida, injurias al Comendador y a su propio padre, rapto de una novicia, muerte del Comendador, para volver en la segunda parte a otra historia, pasados unos años, en que su falta de arrepentimiento le lleva a injuriar a los muertos y a organizar el convite ante la estatua del Comendador.
La <<Hostería del Laurel>>, la escena <<Del Sofá>> y el <<Panteón>> pusieron al mucho público en franca situación y escénica.
Los espectadores siguieron en máximo silencio y respeto el devenir de la obra, que arrancó encendidos aplausos tras cerrarse las cortinas en cada acto, exigiendo la presencia de los actores en las diferentes fases o cuadros.
Destaquemos como decimos al inicio, la gran voluntad y trabajo que lleva montar y dirigir un evento de esta magnitud, que solo es posible por la tenacidad de su presidenta Isabel Oliver (también Doña Inés) y su secretario Celestino Álvarez (también Don Juan), sin olvidar al resto del elenco todos ellos miembros de esta “Asociación Literaria y Cultural” << Ateneo Blasco Ibáñez>>.
El próximo año se os espera. No faltéis a la cita <<noviembrina>>.