Para algunos la fatiga del mucho <<ajetreo>> anidará en nuestro cuerpo, respiraremos profundo y aparecerá el último hálito de fuerza, sazonado de nostalgia, para acudir a la mágica noche de la ‘cremà’
El 20 de marzo 2018, en el rostro de los primeros y madrugadores transeúntes, quizá se muestre alguna marca de agotamiento, a la vez que una renovada esperanza, pensando en que de nuevo comienza el ciclo de las próximas fallas, que se vivirán con la misma alegría y espíritu fallero… dentro de un año.