El consumo de este magnífico alimento ha caído en nuestro país desde la década de los setenta
Día Mundial de las Legumbres, la ONU estableció el 10 de febrero como una fecha emblemática por la lucha contra el hambre, la salud y el medio ambiente.
Los expertos en nutrición alertan que hay que revertir la dejación de este consumo y volver a colocar este <<superalimento>> en sitio muy destacado en nuestra mesa y varias veces por semana.
Las legumbres en todas sus variedades –lentejas, judías, habas, garbanzos, guisantes, altramuces e incluso soja– son una fuente vital de proteínas de origen vegetal y aminoácidos.
Otra de las principales características de las legumbres es que apenas tiene grasa y la poca que contiene es de origen “poliinsaturada”, según estudios aportan también a nuestro organismo micronutrientes, minerales como calcio, fósforo, hierro y manganeso, además de vitaminas B1 y B2.
Pese a lo saludables que son, no se consumen en la actualidad más de 3,5 kilos de legumbres al año por persona, siendo los mayores de 50 años los habituales “parroquianos”.
Como curiosidad
Los humanos llevan/llevamos, más de 12.000 años cultivando y consumiendo legumbres y en 2050 se podría doblar la producción actual de legumbres a nivel mundial.
Las legumbres eran veneradas en la antigüedad, ya que para muchos pueblos no eran solo alimentos, sino también un elemento muy importante en sus culturas. Por ejemplo, los egipcios incluían legumbres entre las riquezas con las que sepultaban a los faraones y los griegos y romanos las ofrecían como ofrenda a los dioses.