La celebración tiene el propósito de coincidir con la festividad de San Joaquín y Santa Ana, los que fueron padres de la Virgen María y abuelos de Jesús, según la Biblia
La figura de los abuelos en casi todas las culturas siempre asumió un halo de respeto y veneración, por sus experiencias acumuladas y el consejo experimentado, que de ellos se podía recibir.
Por otra parte, los abuelos que comparten actividades y experiencias enriquecedoras con sus nietos influyen de manera positiva en su comportamiento y relaciones interpersonales. Además, este vínculo de amor, afecto y diversión contribuye notablemente a la salud emocional de los abuelos, haciéndolos sentir útiles, activos y felices.
Nunca hemos tenido más presentes a las personas mayores como en los meses que llevamos de pandemia.
Por eso que este <<Día de los Abuelos>> suene a algo muy especial.
Han sido el grupo de edad más afectado, el primero en sufrir el aislamiento, la soledad y los terribles efectos del covid-19, que por desgracia, han acabado con la vida de muchos de ellos.
Hasta que llegó la pandemia a nuestras vidas este día era para recordar y agradecer esa labor callada de los abuelos como segundos padres, como salvavidas económicos en los momentos de apuro, como recurso siempre a mano para cualquier emergencia…
En resumen, un para <<TODO>>, que siempre han hecho con gusto cuando han sido necesarios.
