En la actualidad, propiciado por los últimos mandatarios municipales, Valencia Capital, te pone en claro riesgo con el ‘carril bici’, es posible que no lo parezca, pero el golpe puede tener considerables consecuencias.
Algunos ciclistas circulan a fuerte velocidad, para ellos es su “velódromo”, se sienten dueños absolutos de este carril que por lo general transcurre dentro de las aceras.
Su sistema de aviso es ¡¡Yeee!! Que pronuncian con un grito despreciativo y orgulloso de su condición de ciclista.
Cabe preguntarse: ¿Pueden circular a estas altas velocidades? ¿Deben llevar algún sistema de aviso? ¿Al transeúnte, le ampara algún derecho cuando tiene que cruzar esta zona?
Es muy posible que nos falte la llamada ‘cultura de la bicicleta’, como afirman que existe en otros países, pero de ser así, implica a los peatones y también a los usuarios de este medio de transporte.
Mientras tanto, con harta frecuencia, las aceras de nuestra Valencia se llenan de ¡¡Yeee!! ¡¡Animal!! ¡¡Estás ciego…!!
Reproches e improperios se entrecruzan, el peatón se queda con el susto y el ciclista acelera su marcha, quizás murmure, << este carril es mío…>>, pero ya no se le oye.
Séneca nos regala esta frase:
“La razón trata de decidir lo que es justo. La cólera trata de que sea justo todo lo que ella ha decidido”