Cien años separan estas dos fotografías (1909-2009), la ambientación es de lo más diferente, de bulliciosa y transitada a pie por los ciudadanos de la época, que incluso invadían la calzada y los raíles del tranvía, a calle de circulación rápida para los actuales vehículos.
(Calle de la Paz año 1909) – Archivo
En el siglo XIX se decidió acometer una audaz reforma urbana en la ciudad de Valencia, una gran calle uniría la Plaza de la Reina, con La Glorieta y el Parterre, núcleos ambos de muy importante significación para la sociedad valenciana. Se tuvieron que derribar dos conventos, entre otras construcciones, y las obras no pudieron concluirse hasta 1920.
(Calle de la Paz 2009)
La calle de la Paz es emblemática en la metrópoli para valencianos y visitantes, la mayoría de los edificios, hogares de la gente adinerada de antaño, hoy se han convertido en inmuebles de oficinas y los bajos dedicados durante años al comercio de las mejores joyerías y tiendas de textiles, ahora tienen múltiples y variopintas actividades, con amplia presencia de agencias de viajes.
A pesar de los naturales cambios, recorer con calma sus aceras, teniendo como faro y meta Santa Catalina, cuya torre se divisa al fondo, estoica, majestuosa y bizarra a través del tiempo, todavía tiene gran encanto.