Francisco Ponce Carrasco

El Ventanuco – Maletas perdidas

Artículo publicado el día siete de marzo
en el diario Valéncia hui
autor: Francisco Ponce Carrasco.

Con la mirada fija en la cinta automática, observo como mis maletas son tragadas por aquella gran boca con aspecto de ‘trampilla’ y dientes en forma de faldones de flexible goma, que la hacen esfumarse.

El avión inicia su vuelo, las casas, los campos, los coches todo se convierte al tamaño de juguetes, las nubes quedan bajo de nosotros, nos avisan que podemos quitarnos el cinturón de seguridad. Entonces más relajado, es cuando me cuestiono si las maletas estarán en la bodega de la nave, volando conmigo.

Solo la compañía Iberia y Spanair, en el año 2007 han perdido 620.000 maletas en cifras aproximadas. Cuando estos casos se producen, aparte del perjuicio material se causa un daño moral que en ocasiones es irreparable. ¿En dónde quedó el vestido de noche y el traje de gala, que en unas horas teníamos que lucir en la fiesta a la que estábamos invitados, o el regalo para la novia guardado durante mucho tiempo, o esos presentes que compre en remotos países, para mis seres queridos?

Estamos al corriente de que se puede solicitar una reparación monetaria, que por lo general, nunca alcanza el valor real. Desde luego jamás compensará las molestias, nervios y el desencanto sufrido. Resignado haces la reclamación. Existen testimonios de que transcurridos ocho o diez meses te compensan con 150 euros, que seguramente ya te has gastado en llamadas telefónicas, interesándote por el asunto.

Me extraviaron maletas, y seguro que perderé alguna más, eso si, el día que pierda las maletas de mis sentimientos ese día… ¡Me meto dentro de un baúl, y me facturo yo mismo, en un intento por desaparecer!