Castellnovo C. F. – Un partido anodino

El día había amanecido espléndido, buen sol y temperatura hasta agradable, teniendo en cuenta que era febrero. Segismundo a cuerpo gentil – léase en camisa –, salió hacia el bar de la plaza sobre el mediodía para ver si encontraba a Genaro o al hijo de este, con quienes últimamente había viajado para ver a su Castellnovo C.F. en los desplazamientos.

Apenas había andado unos metros, escuchó a sus espaldas:

-“Segis” ¿Estás tonto o qué?, ven a por una cazadora, acabas de salir de un resfriado y te marchas en camisa.

La reprimenda era de María, su mujer, regresó a por la prenda, las mujeres en cuestiones del clima tienen mejor criterio que los hombres y además para esos menesteres tenía mando.

Llegó al bar de la plaza y no encontró a su amigo, siguió por la calle de Arriba hasta que lo localizó en el casino de los jubilados, frente a una cerveza y un plato de sepia a la plancha, “Segis” pidió lo mismo y luego invitó a Genaro, que ni mención hizo de pagar, bueno… luego su hijo pondría el coche para desplazarse a Jerica y una cosa por otra.

-A las tres y media pasamos a por ti.-

-Un poco tarde.- insinuó.

-¡Quía! Si a Jerica vamos en un santiamén.- sentenció Genaro.

El horario se cumplió preciso y exacto y cinco minutos antes de comenzar el encuentro en el Campo Municipal de Randurias, ya estaban buscando amigos y su poquito de sol, que hacía gozo tenerlo como compañía.

Segismundo mantenía una esperanza de victoria oculta, no la demostraba para ser prudente, pero se le fue desvaneciendo cuando vio una primera media hora de juego anodino por parte de ambos equipos y además, faltando diez minutos, para finalizar la primera parte el C.D. Jerica castigó su ilusión con un gol, la cosa no pintaba bien.

-Hemos vuelto a las andadas, no empujan, ni presionan…malo…malo.

Segismundo estaba ‘tocado’ pero siempre creía en los ‘milagros’ de su Castellnovo y esperaba.

Empezó la segunda parte, más de lo mismo, sin empuje, el entrenador del Castellnovo C.F. (Chimo) hizo unos cambios, pero como si nada, no era el día de los blanquinegros y desde luego no era el equipo que ganó a domicilio el domingo anterior, la esperanza del empate existía, pero no se materializaba.

-¡Leche!…la puntilla.-

Exacto, faltando poco para el final, en el minuto 86, el C.D. Jerica, marca de nuevo. Un balón arriba desde la defensa local lo controla el extremo derecha y por bajo bate al portero (Chimo), dejando el encuentro visto para sentencia con el 2 -0. ¡A seguir esperando mejores oportunidades!