Francisco Ponce Carrasco

Tatuajes ¿Arte o Locura? – ¡Cosa fina! Magazine

Pues miren no lo sé, por cuanto entenderlo no soy capaz, solo opinaré que una mujer de esta guisa no me apetece, además en una noche de desenfreno amoroso,  me distraería mucho admirando cada centímetro de su cuerpo y a buen seguro acabaría fastidiándome/la.

Supongo que algún psicólogo – tatuado/a – sabrá acercarse mejor a la motivación de estas personas que así decoran su ‘fachada’, que por otro lado deben tener muchas oportunidades de lucir, ya que un abrigo largo no debe ser su habitual ropaje.

Naturalmente que cada uno es libre de hacer con su dinero –económico no es tatuarse- y con su cuerpo lo que quiera, ¡Faltaría más! Pero estas mujeres se pasaron un poco, o a lo peor NO.