Francisco Ponce Carrasco

Mujeres bonitas, en su día – La Columna

El 9 de septiembre es la fecha seleccionada para celebrar el Día Internacional de la Belleza

Asimismo, es un día para reflexionar sobre la presión social impuesta por los estándares de belleza, en diferentes países y culturas.

La belleza es una noción abstracta y subjetiva referida a la cualidad de una persona, animal o cosa que genera una sensación de placer y un sentimiento de satisfacción o bienestar emocional, a través de la percepción y la experiencia sensorial.

El diploma CIDESCO ha ganado reconocimiento a nivel mundial.

La belleza proviene de diversas manifestaciones, relacionadas con la forma, el aspecto visual, movimientos, sonidos, olores y sabores. Generalmente se asocia con la estética y el aspecto externo y depende de la respuesta emocional de nuestros semejantes.

Algunas de las cualidades asociadas con la belleza son: la proporción de las formas, la armonía, la simetría de los rasgos externos y la perfección. Es una interpretación subjetiva que depende de la respuesta emocional de las personas, percibida a través de los sentidos de la vista.

Unido a ello podríamos añadir, (también importante) la belleza interior tales: como la personalidad, la gracia, la inteligencia, la simpatía, la elegancia y el encanto.

Por otra parte, en la actual sociedad y diversas culturas, han desarrollado en los últimos años estándares de belleza, los cuales determinan las características físicas que deben tener las personas, tales como, ojos grandes, labios brillantes, puente nasal recto, mentón o mandíbula pequeños y forma de cara simétrica.

Lo importante es que se sientan bien consigo mismas, tanto en el exterior como en el interior.

¡A modo de reflexión cada persona es “BELLA!… a su manera.