Santa Eulalia del Campo – Teruel

1 octubre 2007 por Francisco Ponce en Noticias, Relatos, Santa Eulalia del Campo, Todos los artículos

«BARRIO DULCE»

Esta localidad dispone de servicio del ferrocarril, línea (Valencia-Zaragoza) que tiene una importante y tradicional parada en ella desde hace muchos años, nada mas tendríamos que fijarnos en la estructura de la estación de primeros del siglo pasado con añoso aspecto.

Estacion de Santa Eulalia del Campo

El emblemático y característico reloj formando triangulo muestra las horas por dos de sus caras y funciona exacto. Testigo indudable de encuentros con fuertes abrazos y despedidas de pañuelos agitados por manos temblorosas. En ambos casos, sospecho, que acompañado de unas tenues lagrimas. ¡Eran otros tiempos!

Actualmente está en fase de ejecución avanzada, el proyecto de un tren de ‘velocidad alta’ apreciable por el amplio andén del fondo, el paso subterráneo para pasajeros y el mayor número de vías. Ah si…el cartel de plástico atornillado próximo al reloj con rotulación actual que indica el nombre de la localidad ¡Faltaría más!

Barrio azucarera en su parte alta

Al otro lado de las vías y del pueblo se encuentra el Barrio de la Azucarera. ‘Barrio dulce’ como su nombre indica y sus habitantes acreditan por su sencillez y sociabilidad. Estas casas fueron construidas con el fin de albergar a las familias en su mayoría llegadas de otros lugares de España, para incorporarse a los trabajos de la fabrica de azúcar (hoy sin actividad como tal) de la que distan escasamente 200 metros.

Barrio azucarera en su parte baja

Las viviendas por lo general de una sola planta, fueron habitadas sucesivamente por diferentes empleados en el tiempo, hasta que en un momento dado fueros adquiridas por los últimos moradores, cuando se aproximaba el cierre de las instalaciones fabriles, sobre el año 1980. Todavía algunos de sus dueños recuerdan con cariño y nostalgia sus tiempos de actividad y pujanza. Con certeza digo que son personas de entrañable encanto.

A pesar de que se encuentran algo alejadas del centro del pueblo, tienen a su favor el encanto de estar más próximas a la naturaleza, campos donde pastan los rebaños de corderos que en estas zonas de Teruel tienen fama de exquisita carne.

Corderos pastando

También las tareas agrícolas, hoy mecanizadas, confieren a estos alrededores un aspecto cromático de bella impronta.

Tractor con su carga de paja

La actividad agraria está presente en primavera, verano y otoño, puesto que los inviernos suelen ser fríos y con vientos racheados propios de la amplitud de estos páramos.